¡La Hora del Cuento! Cuentacuentos

Para la tercera actividad, nos dividimos en grupos de tres, cada miembro del grupo tenía que escoger una de las tres estrategias de transmisión literaria: lectura, narración con libro o cuentacuentos. En mi grupo, como coincidíamos hicimos papelitos y cada uno contó la estrategia que le tocó. La actividad consistía en prepararse lo que hubiésemos elegido y después contárselo al resto de tu grupo, tenías que decir la estrategia que habías elegido, la edad a la que estaba destinada y las preguntas que ibas a hacer. Después se daba un feedback y cuando el grupo había hecho el trabajo completo, se rotaban para hacer la estrategia a otras personas y dar el feedback.

Después de leer varios cuentos folclóricos, el cuentacuentos que escogí fue El Rey Pico de Tordo de los hermanos Grimm. Escogí este porque me pareció un cuentacuentos adecuado para niños de 5 años, a esta edad muchos niños ya están acostumbrados a escuchar cuentos, y este es un poco largo, por lo que creo que serán capaces de aguantar toda la narración. Como aparece en los apuntes de Irune, a los cinco años, los niños comprenden el castigo y el premio, por lo que este cuento es adecuado para esta edad. Además están en la edad en la que la fantasía forma parte de la realidad por lo que las transformaciones mágicas de los personajes son elementos de la realidad.

En cuanto a la historia, había algunas palabras que había que adaptar para que los niños lo entendiesen pero creo que es un cuento que está muy bien.

Como he dicho antes me leí otros cuentos como el del Pescador y su mujer pero lo deseché porque no tenía final o el de La botella, pero me parecía que había demasiados personajes y demasiados lugares lo que podría ser un poco lío.

En cuanto a la preparación del cuento, lo leí varias veces para aprenderme bien la historia, vi las palabras que podrían ser difíciles y las cambié por otras como por ejemplo, un húsar por un caballero. Me pareció que la historia era un poco larga así que intenté resumirla un poco quitando aspectos que fuesen poco relevantes, como por ejemplo eliminando pretendientes de la princesa, en vez de 5 dije solo 3.  Durante la narración del cuento hice algunas de las preguntas que me había preparado para preguntar cómo, ¿Sabéis lo que es un tordo?, ¿Sabéis lo que son los defectos?

Después del cuento hice otras preguntas, que son: 

¿Qué os ha parecido el cuento?

¿Os parece bien lo que hace la princesa?

¿Qué hubieseis hecho vosotros?

En cuanto a la valoración de mis compañeros, los cinco coincidían en que la historia se hacía un poco larga, me dijeron que intentase acortar alguna parte más y me felicitaron porque hacía algunos gestos y cambiaba la entonación y la voz según fuese un personaje u otro. 

El primer grupo me dijo que a la hora de contar el cuento, hiciese más pausas para crear intriga o que hiciese preguntas como: ¿Sabéis que es lo que pasó? Después de esto cuando se lo conté al segundo grupo, intenté mejorar lo que el grupo anterior me había dicho y la historia pareció más entretenida, aunque la historia seguía siendo larga, pero es que ya no podía quitar nada más porque si no se perdían detalles de la historia que eran importantes. 

En el segundo grupo me dijeron que tenía que mirar más a los que me estaban escuchando y a todos por igual no más para un lado que para otro para que se notase que la historia iba para todos y no solo para un grupo determinado. En cuanto a las preguntas y a la edad me dijeron que estaban bien.

AUTOEVALUACIÓN

Creo que a medida que iba contando la historia iba cogiendo más soltura, mi narración fue mejor en el último grupo porque ya sabía que cosas me podía saltar para que no se hiciese tan larga la historia y que pausas o preguntas podía hacer para que hubiese más intriga.

Creo que es muy bueno y muy importante que tus compañeros te corrijan para que, cuando cuentes cuentos a los niños, lo hagas de manera correcta y de forma que tengan deseo de escucharlos. Me pareció genial que mis compañeros me dijesen que era importante que mirase más a todos y por igual, en mi caso, a las dos compañeras a las que les contaba el cuento, porque es una forma de hacer partícipes a todos los niños y que sientan que todos son parte de la historia. Me pareció que mis compañeros me dieron unos consejos muy buenos que usaré cada vez que cuente cuentos.

Considero que hice un buen trabajo en cuanto a contar la historia y por los comentarios positivos de mis compañeros. Me parece que esta evaluación es muy significativa porque te ayuda a mejorar y a aprender mucho más.